Tercer día en la capital alemana. Si el primer día en Berlín habíamos mirado al pasado con visita a un refugio antiaéreo incluida, y el segundo día recorreríamos el Berlín «Mitte» o centro, hoy dedicaremos el día a conocer cómo era la vida cotidiana en la República Democrática Alemana (DDR en alemán) visitando el museo y paseando por la zona donde aún se conservan los bloques de edificios comunistas. La tarde la dedicaremos al ocio en los locales a orillas del Spree, con visita a la mítica «East Side Gallery» con baño incluido en una piscina integrada en el río ¿nos acompañas?
Sí, sí, ya sabemos que el Museo de Pérgamo es un imprescindible de Berlín, pero cada uno tiene sus gustos y nosotros tenemos especial interés en el Museo de la DDR (A), por aquello de que nos acercará a la historia de la Alemania del Este y su forma de vida durante los 40 años de existencia.

Cómo eran sus casas, qué productos se consumían, el muro, la Stasi, etc … Se trata un museo interactivo muy ameno en el que hasta puedes conducir un trabant… ¿Quieres conocer cómo fue nuestra visita al DDR Museum?
Y si antes hemos visto una simulación de cómo era la vida en la RDA, ahora nos desplazaremos a la Karl Marx Alle (B) para ver lo que aún queda de realidad, pues en esta avenida aún se conservan los edificios de la época comunista.

A orillas del Spree encontraremos locales muy pintorescos…
Uno de ellos es el «Yaam» (Young and African Arts Market) (C), algo así como una playa con ambiente «afro».
Para entrar en la Yaam tendrás que pagar una entrada de un euro y te sellarán la mano, tal cual una discoteca. Y…. ¡Bienvenidos a África! Pues lo primero que encontrarás son chiringuitos de gastronomía de este continente.

Platos ricos y a buen precio. Por cierto, la bebida tendrás que comprarla en el bar que hay en la terraza.


Sol, arena, tumbonas, cervezas, música reggae… ¿Dónde estamos?… ¿Jamaica..? ¿Berlín? Por cierto, no sé porqué será que estos lugares con ambiente alternativo huelen a porro…


¿Podemos pedir más? Pues sí, un lugar donde bañarse porque el Spree no es muy aconsejable… En la Yaam hay instalaciones para ping-pong, practicar vóley-playa, e incluyo un half-pipe para monopatines, bicicletas, etc…

Y esto de día, porque las noches suelen amenizarse con música en directo y/o malabaristas y otros que muestran otras habilidades.

Después del relax en la playa artificial, andamos un poquito hasta la East Side Gallery (D), el tramo del muro que es hoy la galería de arte al aire libre más grande del mundo.

En casi 1,5 km de la parte mejor conservada del muro se suceden distintos murales de diferentes artistas como expresión de entusiasmo ante el futuro de una Alemania unida que auguraba prosperidad.
Las más famosas son las del beso de Brezhnev y Honecker, o la del Trabant, el coche comunista más popular.


La East Side Gallery desemboca en el Bar Pirata y en el Oberbaumbrücke, un puente que sirvió de frontera entre el área urbana y el rural y que a la construcción del muro separaba el Berlín Este del Oeste.

Hoy el Puente Oberbaum separa los barrios de Kreuzberg y Friedrichshain, así que tendremos que atravesarlo para dirigirnos al Badeschiff.

En esta zona en la que se encuentra la pequeña isleta entre el Spree y el Landwehrkanal hay varios «biergarten» y locales de ocio muy curiosos junto al río y al canal.

El ambiente playero del «YAAM» nos dejó con ganas de pegarnos un baño ¿bañarse en el Spree? ¡No! No resulta muy atractivo, peeero… ¿Qué tal en una piscina integrada en el río? ¿Os gusta la idea? Pues tendréis la sensación de estar en medio del Spree pero en agua limpia y a buena temperatura.

Esto es el Badeschiff (F), una piscina flotante conectada con un embarcadero de madera con tumbonas para tomar el sol, incluso hay una zona de arena. ¡Esto sí que es ambiente playero! Entrada a 5,5 euros/persona. Por cierto, también hay uno integrado en el Danubio en Viena, pero en nuestro viaje a la capital austriaca no lo visitamos porque la época del año no acompañaba como para ello…
Tanto baño nos ha despertado el hambre, así que nos dirigimos al «Burgermeister«, unos antiguos urinarios públicos donde se dice que se comen las mejores hamburguesas de Berlín… No digo que no, pero al ver tanta cola para encima tener que comer de pie, no sabemos si merecerá mucho la pena…, así que decidimos comer en el Kebab de enfrente…

Y para bajar la cena daremos un paseíto por Kreuzberg (G), el barrio turco de Berlín o también conocido como el «pequeño Estambul» ya que en él se concentra la gran mayoría de inmigrantes de ese país. Prueba de ello es esta mezquita…

Y así es como llegamos al final del día… Tengo que decir que el barrio es mejor visitarlo de día… A la noche nos dio sensación de peligroso…
Mañana será nuestro cuarto y último día en Berlín, que dedicaremos en gran parte a visitar el pulmón verde de la ciudad, el Tiergarten. ¡A descansar!
Muy hermoso, como se ama a la RDA 🙂
Me gustaMe gusta